lunes, 30 de junio de 2014

Ese sitio al que siempre me gusta volver

   En la entrada anterior hablaba sobre conocer nuestros lugares y rincones pero aveces forman parte de tu vida desde siempre y casi sin darte cuenta. Son esos lugares que podrías, casi casi, llamar hogar.

   Hace unas semanas, aprovechando que tenía que hacerle un recado a mis padres,  me fui a pasar el día por Carnota y alrededores. Más concretamente estuve por Cee, Finisterre, Ézaro, Carnota y Muros. Por motivos personales tengo mucho cariño a un lugarcito de Carnota, O Pindo. Y siempre estoy feliz de volver por allí y estar cerca de gente que quiero mucho, me hace feliz.

   Por la mañana fuimos directos a Cee para dar un paseo por el mercado, que son los domingos. Muy bonito la verdad, me ha gustado. Luego, y antes de ir a comer, nos pasamos por Finisterre. Como es de costumbre había bastante gente, eso está bien pero nosotros simplemente dimos un pequeño paseo por allí y como hacía mucho aire pronto volvimos a Cee para comer. En el restaurante del "Hotel A Insua" donde la verdad es que comimos muy pero que muy bien. Una ensalada de quesos y pollo con una de las salsas más ricas que he probado nunca, un pulpo a la plancha muy sabroso y un risoto de pulpo y setas con queso manchego muy rico también. De postre una tarta de galletas que no diré que estaba deliciosa porque las tartas todas están muy buenas.

   Para bajar la comida nada mejor que un paseo por una bonita playa de la zona, concretamente cerca de la Cascada del Ézaro, pero de eso hablaré mas tarde. Estaba hablando de las playas. Yo no soy mucho de playa, lo reconozco, no me gustan. El agua aquí está helada, no me gusta estar horas tirada al sol vuelta y vuelta para ponerme morena. ¿Morena? Y para que quiero estar morena, quien me quiera me querrá igual morena o blanca y para la piel tostarse de sol a sol no es lo mejor. Además que llegas a casa con arena hasta en sitios que no sabes que existían. No, no me gusta ir a la playa, pero si reconozco que dar un paseo por ella puede ser muy bonito y romántico. Incluso hasta relajante.

   Y ahora si, la Cascada del Ézaro, un lugar bonito de visitar con una bonita cascada y un bonito paseo. Está en Ézaro, en el municipio de Dumbría, colindando con O Pindo, en Carnota. Es la desembocadura del río Xallas en el mar. Un sitio de esos que hay que visitar una vez en la vida, pero la verdad es que yo ya lo conozco y ya he estado varias veces por allí. Solo sacamos unas pocas fotos y ya.

   La siguiente parada fue el mirador en donde está el parque eólico. Yo le llamo "As Paxareiras" no sé si realmente se llama así pero creo que si. Desde allí hay una bonita vista panorámica de la playa de Carnota aunque para nuestra desgracia estaba un poco nublado. Y ahora que hablo de la playa de Carnota allí es a donde fuimos después. Nos sentamos en la arena y vimos a unos chicos hacer surf, unos que estaban montando a caballo por la playa, la gente pasear... y la verdad es que se estaba bien.

   Luego ya cogimos camino a casa pero antes paramos en Muros a tomar algo. Esta vez no he parado en O Pindo porque no iba sola pero me gusta visitar a quien allí y pasear por eses sitio que tan buenos recuerdos me trae de una persona a quien quise tanto y ya no está aquí. Pero bueno, lo que quería deciros es que siempre está bien coger el coche y visitar lugares tan bonitos que tenemos por aquí.


lunes, 23 de junio de 2014

¡¡Noticias frescas!!

   Muy buenas a todos y todas. Antes de nada quería perdón por este parón. Yo no quería, de verdad, pero es que aveces el día no tiene más horas. Pero si, me merezco un buen tirón de orejas.

   Os voy a explicar que he estado haciendo estos últimos meses. Al principio no he escrito por falta de, digamos que inspiración, yo me ponía a escribir pero tenía que borrarlo todo porque nunca me gustaba ni me parecía merecedor de ponerlo por aquí. Al final conseguí empezar a escribir algo que me gusta pero empezaron en casa a meterme en un follón que empezó a dejarme un poco sin tiempo. Tengo pendiente esa media entrada que tengo ahí esperando. Tengo que acabarla, prometo ponerme a ello ya mismo. Pero ahora voy a contaros que me tiene tan liada. 

   Hace tiempo que en casa venimos quejándonos del mal pan que traía nuestra panadera pero es que los que venían antes tampoco nos convencía mucho. Lo que pasa es que últimamente era bien, bien malo. Pero malo, malo.  Lo único que me da pena fue no sacarle una foto para que lo vieseis pero imaginaros una buena hogaza, de un kilo, bueno pues podías cogerla aplastarla y enrollarla como un rulo. Así, tan cual. Ibas a cortarlo y en vez de cortarse de encartaba. Y de sabor, de sabor no sabía a nada. No había por donde cogerlo. Entonces con estas empezó un vecino a traer pan y decidimos cogérselo a ver que tal era y bueno ya sabéis el refrán: "Más vale malo conocido que bueno por conocer". Era peor, mucho peor y el doble de caro. Yo como estudié panadería y pastelería y aunque solo me he dedicado a esta última decidía un día amasar y hacer un pan en casa. Les gustó tanto que llamaron al panadero para que no dejase más el pan y me pusieron a mi a hacerlo. Y como la batidora/amasadora que teníamos en casa no valía para anda aprovecharon y por mi cumpleaños me regalaron una preciosa Kitchen Aid azul cielo. Me dispuse a amasar y para mi sorpresa se me calentaba muchísimo y olía raro. Lo del olor es normal porque al ser la primera vez que funcionaba es normal que huela así pero lo de que se me calentaba ya no lo veía tan normal y me extraña porque me consta de que estas pequeñas máquinas son muy grandes y muy buenas. Por eso me la llevé a la tienda y tras tenerla un rato encendida y no calentarse tanto, claro no es lo mismo tenerla funcionando con masa a tenerla vacía, entonces me dijeron que la llevara a casa y si seguía calentando que me la cambiaban. Total que al final me la tuvieron que cambiar, por una roja. Lo que pasa es que no conseguía lograr el punto perfecto del pan. Pero todo esto os lo contaré en el nuevo blog de recetas, repostería y todo estes rollos que están ahora tan de moda. Que por cierto os dejo el nombre y el enlace a continuación


   Espero veros por allí también y prometo no descuidar este rincón que me encanta e intentaré escribir por lo menos una vez a la semana a poder ser los lunes, aquí. En "Las delicias de ALiS" escribiré cositas nuevas que yo vaya haciendo y experimentando, que experimentar también mola. Pues eso, estos días subiré una bonita entrada que tengo a medio escribir y otras que tengo pendientes también. Gracias por leerme.